No sé qué hacer…

Muchas veces pensamos que el domicilio en el que residimos actualmente será en el que vamos a vivir muchos años. Pero en muchas ocasiones y por diversos motivos tenemos que mudarnos.

En respuesta a esta pregunta es todo muy relativo, ¿recuperarás el dinero invertido? DEPENDE.





El primer factor que tenemos que tener en cuenta es: cuánto dinero hemos invertido en la reforma de nuestra vivienda y que materiales hemos utilizado. Está claro que cuanto más bonito sea el piso visualmente y más nos entre por los ojos más fácil será de vender. Ahora que sí en una reforma nos hemos gastado cantidades desorbitantes de dinero y hemos puesto unos materiales que aún siendo de primera calidad han sido excesivamente caros, será muy difícil recuperar ese dinero.

Por otro lado, tenemos que tener en cuenta la zona y el tipo de inmueble. Con respecto a la zona, (y aunque parezca una tontería) depende del lugar en que este situado nuestro inmueble los compradores estarán más o menos interesados en que la vivienda disponga de algunas cualidades como la calidad de los materiales con los que se haya reformado él piso.



Con lo referente al tipo de inmueble tenemos que preguntarnos, ¿voy a rentabilizar las reformas que he hecho (suelos y puertas de roble, mármol brasileño en la cocina, ventanas insonorizadas de pvc,…) en un 4º sin ascensor? No. Al igual que ocurre con la situación, el tipo de inmueble también influye mucho. Antes de lanzarnos a hacer una reforma: tenemos que hacer un breve análisis sobre nuestra vivienda y crear un perfil sobre el cliente potencial de nuestro domicilio: ¿estará dispuesto a pagar más por qué los suelos sean de roble o por qué la cocina tenga los suelos de mármol brasileño?



Puede parecer que os estemos diciendo que no vais a recuperar el dinero que invirtáis en hacer una reforma, pero lo que estamos intentando explicaros es que siempre que en las reformas que hagamos se mejore la estética de la vivienda y no implique grandes desembolsos de dinero, estos gastos pueden ser recuperables.

Lo que está claro es que actualmente en el mercado inmobiliario hay más oferta que demanda. Hace unos años era el vendedor el que ponía el precio que el estimaba oportuno a su vivienda: el comprador si quería lo aceptaba y si no pues ya aparecería alguien a quién le interesara comprar la vivienda. Lo malo es que en el mercado actual es el comprador quién prácticamente marca el valor del suelo. ¿Y con qué propiedad se quedara un comprador? Pues con la vivienda que mejor calidad-precio les ofrezca.



¿Tienes la mejor calidad- precio? ¿Has hecho una reforma y has recuperado la inversión al venderla? ¿Tienes ganas de reformar tu casa pero no te atreves?